Cuando hablamos de amplificadores y preamplificadores, en la gran mayoría de ocasiones tenemos problemas a la hora de diferenciar entre ambos. Por ese motivo, con la ayuda de nuestros expertos vamos a explicarte qué es cada una de las cosas. Así podrás entenderlo mejor y en consecuencia sabrás que es lo que realmente necesitas en cada momento.
¿Qué es un amplificador?
Podemos definir un amplificador como apartado que es capaz de magnificar lo que pasa a través de él.
Cuando hablamos de amplificador debemos saber que el amplificador de potencia es lo mismo. En este caso, la señal que se toma viene del preamplificador. Esa señal luego es traducida a través del amplificador, el cual tiene como objetivo transmitirla correctamente a los auriculares o altavoces.
Gracias al amplificador se consigue aumentar la potencia y el sonido de la señal al nivel deseado. Ese nivel se puede regular de manera manual o a través de un mando a distancia.
Eso quiere decir que podemos decir que el amplificador lo que hace es aumentar la potencia y sonido de la señal tras ser emitida previamente por el preamplificador. Una vez gestionada y amplificada, se manda la señal a los altavoces para que pueda ser reproducida.
¿Qué es un preamplificador?
Podemos decir que el preamplificador es un dispositivo electrónico que tiene como objetivo amplificar la señal eléctrica débil en una más potente para poder conseguir una potencia de señal limpia y fuerte. Gracias a esa mejora de la señal, el equipo puede procesar sin ningún tipo de problema.
Cuando hablamos de señal, realmente podríamos decir que la señal eléctrica sería la señal de audio. Mientras que la señal sería producida por el instrumento o el micro desde el cual se está realizando la retransmisión. Finalmente, tendríamos que decir que para que la experiencia fuese completa, el equipo estaría formado por los compresores, altavoces, EQ´s…
Para que te hagas a la idea, cuando hablamos a través de un micrófono, la señal es muy débil, por lo que no se podría trabajar a través del equipo. En este caso, es necesario que el preamplificador haga su trabajo para conseguir los resultados esperados. Por regla general, la ganancia que se necesita va de los 30 a los 60 dB. Con ese aumento ya sí que se puede conseguir una señal desde la cual trabajar con el equipo o lo que es lo mismo, se puede conseguir el nivel de línea.
Los instrumentos en su gran mayoría también necesitan de la ganancia de señal para poder ser reproducidos por el equipo. En este caso se necesita de 20 a 30 dB de ganancia. En el caso de los sintetizadores, también se suele necesitar algo de preamplificación para que el equipo pueda desarrollar su trabajo fácilmente.
Eso significa que el preamplificador es casi necesario a la hora de reproducir casi todas las fuentes de sonido. Sin ese extra, la señal no sería todo lo potente que debería ser, de aquí que los equipos no podrían realizar su trabajo.
No hay que olvidar que las señales de audio tienden a sufrir interferencias. Esas interferencias se traducen en ruidos molestos que deben ser eliminados para conseguir que la experiencia pueda ser positiva. Teniendo en cuenta que el ruido es mayor en las señales débiles, es necesario pasarlo por el preamplificador para conseguir que ese ruido sea eliminado.
En resumen, podemos decir que el preamplificador tiene como objetivo amplificar la señal para conseguir que la misma pueda ser procesada y grabada con facilidad.
Diferencia entre amplificador y preamplificador
Ahora que ya conocemos qué es cada una de las cosas podemos concluir que diferenciar entre amplificador y preamplificador es más fácil de lo que podemos pensar en un primer momento.
El amplificador tiene como objetivo coger la señal que emite el reproductor y aumentarla para poder conseguir que los altavoces puedan emitir ese sonido a la potencia deseada.
El preamplificador es el que se usa únicamente en los equipos especializados que buscan capturar la señal. El objetivo es captar las señales débiles y potenciarlas para conseguir que el sonido se pueda grabar o procesar.
Diferencia entre DAC y amplificador
Si eres una persona experta y amante del buen sonido, debes saber que los amplificadores portátiles o DAC portátiles son muy importantes en el día a día. Si visitas ZocoCity.es, podrás darte cuenta de que existe una amplia variedad de opciones entre las que elegir. Gracias a esas variedades podrás tener la certeza de que encontrarás el modelo adecuado y en consecuencia podrás conseguir una experiencia inmersiva con todo tipo de contenidos.
Comentado ese detalle, pasamos a mostrarte las principales diferencias entre amplificador y DAC.
Del amplificador ya hemos hablado bastante en este artículo. De manera resumida podemos decir que es la parte que se encarga de potenciar la señal de línea del equipo para que los altavoces pueden reproducir el sonido a la potencia deseada.
El DAC es un circuito a través del cual se puede conseguir que una señal con información digital se pueda convertir con facilidad en analógica. Para que puedas comprenderlo mejor, el DAC coge la información digital de “unos y cero” y los pasa a una señal analógica para que pueda ser reproducida con facilidad por el amplificador. La señal digital que se va a traducir puede venir dada por diferentes formatos, fichero de audio digital, CD… pero lo que está claro es que el sistema es el mismo. Pasar la información digital a analógica.
Para finalizar, queremos dejar claro que para obtener una buena experiencia es fundamental apostar por equipos de buena calidad. Dichos equipos están formados por amplificadores y preamplificadores de calidad, pero a cambio son caros. Pero ese sobreprecio merece la pena abonar si realmente queremos conseguir trabajos de muy buena calidad.
Por ejemplo, los móviles suelen tener equipos DAC que son de calidad media o baja. Eso provoca que la captura del sonido sea inferior a la esperada. Igual las personas poco especializadas apenas notan la diferencia, pero las expertas lo notan y mucho. Por ese motivo, nuestro equipo de expertos de ZocoCity siempre nos recomiendan los de más calidad.
